Reseña - Nada, de Janne Teller

"Nada", de la escritora danesa Janne Teller, es un libro publicado en el año 2010 y posteriormente censurado en varios países, como Noruega, Francia, y otros países europeos. Es un dato extraño para comenzar una reseña, pero luego les contaré más sobre esto. De momento, los dejo con su sinopsis. 

"El primer día de clase Pierre Anthon abandona el aula y decide no volver nunca más a la escuela. Ha descubierto que nada importa y a partir de este momento se dispone a vivir de manera consecuente con este hallazgo. Se sube a un ciruelo y desde allí declama a gritos las razones por las que nada importa. Sus compañeros, desmoralizados por sus proclamas, deciden convencerlo y autoconvencerse de que se equivoca y para conseguirlo deciden reunir objetos que simbolicen todo aquello que da valor a la existencia humana y así crear un montón de significado. Poco a poco este proyecto se va convirtiendo en un juego peligroso que les va pervirtiendo moralmente y que les lleva a arriesgar parte de sí mismos y de todo aquello da sentido a sus vidas presentes y futuras".

Nada importa. Hace mucho que lo sé. Así que no merece la pena hacer nada. Eso acabo de descubrirlo.

La primera vez que me topé con este libro fue cerca del año 2015, no recuerdo realmente cómo lo descubrí, pero sí recuerdo haberme desvelado una noche completa leyéndolo en pdf y, una vez terminado, no poder conciliar el sueño de ninguna manera. Luego, un año más tarde, lo vi de casualidad en una librería de mi ciudad, el único que habían encargado. Y no es hasta ahora, 2019, que voy a poder descargar realmente lo que es este libro para mí. O lo que fue, al menos, ya que la primera vez que lo leí fue bastante impactante. 

Con esto dicho, ya podrán imaginarse que esta será una reseña un poco distinta.

No encuentro las palabras para expresar concretamente lo que sentí al terminar de leer el libro. Fueron demasiados sentimientos a medida que iba leyendo la historia, y para ser tan breve, me resultó realmente impactante.

La necesidad de demostrar que el otro está equivocado, sin importar el extremo al que nos lleve, está presente de ambos lados; tanto del que plantea un existencialismo adolescente como aquellos que creen tener las respuestas al mismo.

Y es que sí, plantea interrogantes muy fuertes dentro de todo, y lo hace de una forma que parecía afectar a todos los que lo leen por igual. No importa qué tan adulto te consideres, es casi seguro que Pierre Anthon te va a dejar una huella por un par de días al menos.

Comentarios como "Si es tan fácil morir, es porque la muerte no tiene ningún sentido. Y si la muerte no tiene ningún sentido, es porque la vida tampoco lo tiene", "El significado es relativo y por tanto vacío de significado" y frases del estilo abundan en esta historia, invitándote a reflexionar sobre lo que piensa el chico del ciruelo. Te hace odiarlo, comprenderlo y hasta concordar en ocasiones, lo que lo vuelve un personaje peculiar.

Me encantaría poner todas las frases que más me gustaron de esta obra, pero creo que cada una está tan bien utilizada en su momento que casi que sería quitarle el mérito que se merece. Sería lo mismo que adelantarles un poco del final, no me lo perdonaría jamás (aunque muero de ganas de hablarles de eso).

Es un libro que recomiendo totalmente en cuanto a la trama. Pero si tengo algo que quejarme del mismo, es la redacción. Comprendo que no es un libro para adultos sino para adolescentes/jóvenes, pero no me termina de cerrar. Creo que aún apuntando a ese público podría haberlo hecho mejor. De todas formas, hubiese sido una historia mucho mejor si hubiese sido para adultos, con un desenlace mejor narrado en muchos sentidos, con más detalles.

Todo es un gran teatro que consiste sólo en fingir y en ser el mejor en ello

Una de las principales razones de la polémica que causó es la violencia que se utiliza para contar la historia, con asesinatos, violación, sacrificios, entre otras. Sin embargo, la autora dice que su objetivo principal con el libro simplemente es intentar que la gente reflexione, y que la propia lógica de la historia requería medidas drásticas y incluso violentas.

En palabras textuales de la autora, "Quiero que la gente haga las paces con el Pierre Anthon que todos llevamos dentro. El cuento no tiene un final feliz, pero nosotros podemos tenerlo, si no tememos a las cuestiones importantes de la vida. En vez de tener miedo de la existencia, hay que considerarla como un regalo fantástico".

El libro incita a la reflexión sobre la intolerancia, la pérdida de la inocencia, y el paso a la edad adulta. Es un libro para el que uno tiene que estar preparado, porque está lejos de ser una lectura ligera del momento, pero censurarlo y prohibirlo tampoco es lo adecuado.

Los jóvenes tienen derecho a plantearse esas preguntas desde chicos y, más aún, que los adultos los acompañen a reflexionar e indagar en las mismas; que los apoyen en su recorrido, no que los encierren en una eterna burbuja que los proteja de cosas que puedan no gustarles.

Porque es justamente censurando y prohibiendo que la sociedad se mantiene estancada. Al sistema le sirve la gente calladita, cuanto menos sepan mejor. Y es oponiéndose a eso que uno se hace valer y respetar; motivo para el cual los libros son ideales.

No sólo nos muestran situaciones que nos gustarían vivir, sino que también nos llevan a los lugares más oscuros que nos podríamos imaginar, donde suceden cosas que no hubiéramos pensado jamás, pero que tampoco se sienten tan lejanas de la realidad. O, bueno, nos invitan a indagar sobre el sentido de nuestra vida, y la forma en la que funciona un mundo al cual estamos demasiado acostumbrados, pero nunca le prestamos la suficiente atención.